Cuando una persona pierde su trabajo por una causa no imputable, tiene derecho a pedir la prestación por desempleo. Para poder solicitar esta prestación la persona tiene que haber cotizado al menos 360 días durante los últimos 6 años.
El antiguo trabajador podrá solicitar esta prestación después de cada despido siendo indiferente la causa del fin del contrato. Aquellas personas que hayan solicitado una baja o haya estado en un periodo de prueba no podrán solicitar esta prestación.
Si no se han superado los 360 días cotizados o el trabajador ha agotado el paro, podrá solicitar un subsidio.
Dentro de la categoría de desempleo nos encontramos dos categorías según las necesidades del trabajador.
Primero nos encontramos la clasificación de desempleo total que se da cuando el trabajador finaliza de forma temporal o total el trabajo que estaba realizando. Esta situación de cese puede venir dada por un despido, la finalización de su contrato o un ERE.
El segundo grupo es el desempleo parcial que se da cuando el trabajador ve reducida de manera temporal su jornada de trabajo. Esta reducción puede ser como mínimo un 10% y como máximo un 70% si existe ERTE.
Para poder acceder a esta prestación por desempleo, el primer requisito que debe tener el trabajador es haber cotizado al menos 360 días en los últimos 6 años.
Podrá solicitar el paro cuando el trabajador no tenga una relación laboral con una empresa ya sea por despido o porque ha finalizado el contrato.
También podrán solicitarlo aquellos trabajadores que se encuentren en una situación de ERTE con jornada de trabajo y salario reducido. Los trabajadores fijos discontinuos que se encuentren en un periodo de inactividad también podrán solicitarlo.
Aquellos trabajadores que quieran solicitar esta prestación por desempleo tendrán un plazo de 15 días hábiles desde que se encuentren en una situación de desempleo.
Se debe haber cotizado un mínimo de 360 días para acceder al desempleo. El periodo mínimo que puede ofrecer esta ayuda es de 4 meses siendo la máxima de 2 años. Según los días que hayamos cotizado podremos tener un mayor periodo de paro o no.
Esta duración tiene ciertos requisitos como que solo se contabilizarán los períodos que no se hayan usado para cobrar la prestación por desempleo u otros subsidios.
El tiempo cotizado en una jornada parcial se contará como un día cotizado y los días de vacaciones que no se hayan disfrutado contarán también para ese periodo de cotización.
Para saber cuánto nos corresponde de prestación por desempleo hay que calcular la base reguladora. Para esto es necesario conocer la cotización correspondiente a los últimos 180 días que aparecerá en nuestra nómina como base de contingencias comunes.
Durante los primeros 180 días el desempleado cobrará el 70% de la prestación de desempleo y luego pasará a recibir el 50%.
Algunas de las novedades que trae esta prestación en el 2022 es un aumento del 2,5% alcanzando los 579,02€.
Esta mejora sólo afectará a aquellos desempleados que empiecen a cobrar la prestación por desempleo a partir del 2022, es decir, aquellos que estén cobrando la ayuda pero la empezaran antes no verán aumentada su cuantía.
Si necesitas ayuda para la presentacion de documentación o el pago de tributos relacionados con el desempleo, puedes ponerte en contacto con nuestros asesores especializadso y te orientaran sobre el proceso
Publicado en Laboral